¿Crees que es mejor comprar un cesto de mimbre ya adornado o bien lanzarse a la aventura del DIY (hacerlo por uno mismo)?

Imagina que la haces tú para un nacimiento, como cestas arregladas para una boda, como elemento decorativo para poner en el aseo, para las fiestas de Navidad que ya están aquí o simplemente como  regalo especial y original...en fin:  todo lo que tu imaginación discurra.

En este post te explico PASO A PASO cómo recubrir con tela y adornar con gusto una cesta de mimbre.

Ya verás que vestir una cesta de mimbre natural no tiene que resultar una tarea complicada.

Aunque también pueden adornarse con motivos pintados, que ya te explicaremos en otro post; con esta sencilla guía de ahora te ayudaremos a confeccionar una funda textil para tu canasto.

Además, le darás un toque creativo y original que a todos les encantará. Tu esfuerzo merecerá la pena, y verás que no era tan difícil decorar cestas de mimbre para regalos.

No pierdas detalle; el proceso no es nada complicado y ya verás lo BIEN que queda el resultado.

A rasgos generales sería:



Presta atención y sígueme:

1. Hacer una lista con los elementos necesarios

Antes de ponerte manos a la obra con este trabajo tan creativo, es necesario que revises todos los materiales y herramientas que necesitarás para no olvidarte de ninguno. No te puede faltar ninguno cuando empieces.

Apunta:

• Tela con los motivos elegidos (la cantidad que usarás dependerá del tamaño de tu canasta y calcula siempre algo más por posibles errores o si hay que repetir alguna parte)

• Cinta al bies o goma estrecha

• Hilo de coser del mismo color que la tela (así como de otros tonos diferentes para marcar los pespuntes)

• Una puntilla o algún otro accesorio decorativo como motivos florales (opcional).

Si son canastas de mimbre decoradas para una boda, lo mejor es decidirse por estampados lisos, de tonos crudos, blancos o pastel.

Deja los dibujos si se trata de un detalle para el nacimiento de un bebé, o a modo de frutero para la cocina.

• Cinta métrica

• Tijeras de bordar

• Agujas

• Alfileres para marcar

• Máquina de coser.

¿Tienes todo? Seguimos.

2. Tomar medidas

Es el momento de no despistarse y no confundirse a la hora de medir la cesta para que quede lo más perfecta posible. Repite un par de veces este proceso para que no hay un baile de centímetros a la hora de coser.

No querrás que nos falte tela, ¿no?

Para hacerlo, toma la cintra métrica y extiéndela desde el interior de la cesta, desde su base hasta el borde.

Una vez hecho esto, repite esa acción por el lado exterior de la misma.

Deja unos cinco centímetros antes de llegar a la base por la parte de fuera, para que la tela que usemos para forrarla quede a media altura. De esta manera, quedará a la vista parte del mimbre usado para realizar la cesta.

Piensa que, si el canasto lleva un asa, es conveniente añadir un espacio de unos dos centímetros alrededor y que la tela no quede mal puesta.

Una vez hechas las mediciones oportunas, piensa que tendrás dos trozos de tela por ambos lados para recubrir toda la canasta. Ten presente el sentido de los dibujos o motivos de la tele elegida para que no desentone mucho y no quede mal al colocarla.

Para saber qué cantidad de tela necesitarás para la base, nada más sencillo que colocar la canasta encima del paño y con un lápiz o tiza especial de costura haz el relieve de la circunferencia. Añade un par de centímetros más para el pespunte.

Puedes emplear un patrón o hacerlo directamente sobre el paño.



Como verás, cada una tiene una medida diferente ya que, al ser cestas de mimbre artesanales, no todas siguen unos parámetros estándar e iguales.

¿Qué te parece colocar un par de bolsillos interiores para guardar pequeñas cosas dentro de la cesta? Resulta especialmente útil, si la canasta se usa para guardar cosas de bebé.  Si es así, calcula que los coserás unos dos centímetros por encima de la base.

Y a la hora de medir cuánta tela necesitarás, piensa que en los cuatro lados de los bolsillos tienes que hacer los dobladillos; por lo que no te quedes corta.

La abertura del asa es opcional. Mide el ancho de la misma y la altura. Luego resta unos centímetros de cada medición para tener en cuenta el remate.

3. Recortar las piezas

Corta con cuidado la base ya marcada con anterioridad. A continuación, haz lo mismo con los dos trozos laterales que forrarán el ancho de nuestra cesta de mimbre, tanto por el interior como por el exterior de la misma. Intenta ser lo más recta y exacta en los cortes como te sea posible.

Repite esta operación con la cinta elástica que irá para que la tela se ajuste por fuera al borde la cesta.

En todo momento no olvides que debes dejar un hueco libre para el asa que sujeta el cesto que estás decorando.

4. Coser las piezas seleccionadas

Hasta aquí el trabajo es sencillo, ¿verdad?

¿Cómo continúas para rematar tu trabajo?

Nos queda la parte más importante y tendrás una ESPECTACULAR cesta de mimbre decorada.

Y lo mejor de todo, hecho por TÍ MISMA y sin darte casi cuenta de lo fácil que es.

Sitúa el fragmento de tela sobre la superficie de la máquina de coser y alinea los bordes inferiores de la pieza frontal con la que servirá de base de nuestra decoración.



Comprueba que todo quede derecho y recto y, si lo necesitas, usa las esquinas angulosas a modo de guía para que te quede perfecto. Con un par de alfileres puedes sujetarlas y que te resulte más sencillo para que la tela no se mueva o se descoloque.

El proceso se puede repetir en ambos casos y para los bolsillos, así como del otro lado para poner los pespuntes. Además, si nuestra elección es rematar el borde con una delicada puntilla, es el momento de zurcirla al conjunto. Quedará de maravilla como toque original.

5. Remate final y tenemos lista la cesta

Aunque no te lo creas ya hemos llegado al último paso. Y seguro que te ha resultado más sencillo de lo que pensabas.

Dale la vuelta a la tela ya cosida y coloca la funda en la cesta de mimbre artesanal. Tira de la cinta para ajustar los bordes y remata este ESTUPENDO trabajo con un lazo de lo más bonito.

Un trabajo de 10. ¿No te lo creías al comenzar? Pues así de fácil ha sido y todo con tus propias manos. INCREIBLE.

Si ya quieres dar otro toque más personal, puedes optar por decorar el asa de la cesta con un par de flores secas o bien colocarlas al azar sobre los laterales de la misma. Un motivo de lo más acertado.


CONCLUSIÓN


Miras ahora tu cesta recién terminada y piensas: ¡lo he hecho yo misma! Sí, y no ha resultado nada complicado, ¿verdad?


Incluso me atrevería a asegurar que el resultado es igual de PERFECTO que las canastas decoradas que ya puedes comprar directamente en tiendas especializadas de decoración.


Comenta, déjanos tu opinión. Es importante porque gracias a ella verás aquí otros posts tan interesantes o más que éste.